La habitación quedó lista como para el viaje, mi habitación ahora es un cuarto de hotel.
En hoteles, en playas, empacando, viajando con "maletas" por todos lados y una cajetilla azul con cadáveres de cigarro...
Soy a pesar de mi humanidad, lo más parecido a un camaleón o mas bien no, los camaleones se transforman y yo gradualmente transformo mi alrededor.
Me di cuenta de algo, no puedo desaparecerme de aquí, mudarme cada que un capricho me lo dicte, ni desaparecer a la gente con solo chasquear los dedos, pero sí puedo intervenir, si puedo hacer que al menos mi habitación no sea una prisión de 6 paredes sino mi portal a otro universo donde se dictaminan mis propias reglas y nada más.
Si me vieras detrás de esta puerta realmente me verías, de otro modo al camaleón.
1 comentario:
Los espacios, los cuartos son mágicos.... siempre he creido que mi cuarto es una versión simple y a la vez moderna/sofisticada de 'The gallery of shadows' de V.
Enhorabuena con tu confort.
H.
Publicar un comentario