viernes, 15 de junio de 2012

Momento de mortalidad

Solo para avisar, que no hay nada nuevo que avisar.
O quizá se pueda un episodio de mortalidad:

Ese día, fui a visitarlo recorriendo las antiguas vías que antes eran como mi casa. Llegué hasta ahí, conversamos, salimos, jugamos. Todo tan familiar, hasta los mismos reclamos de la vida del otro.

Entonces casi antes de irme me acercaste a ti, nos abrazamos como las primeras veces; el mundo nos dio la espalda y me dejaste acercarme, aunque seguíamos llenos de temor...

Besabas mi mejilla varias veces, labrando tu camino hacia mi boca, tu camino ya muy conocido, y yo no puedo decir que no sabía que me besarías, lo sabía, lo esperaba y lo deseaba. Y tu beso fue como agua en una quemadura, ardió dolorosamente antes de ser un alivio.

Después tirados en el piso se me escapó un suspiro, el mismo suspiro de la primera vez pero ahora matizado de añoranza y un dejo de tristeza, nostalgia.

No puedo decir bien a bien qué pasaba, no lo sé del todo. Pero lo que sé es que desde hace mucho no me sentía en casa.

S+

1 comentario:

Bird dijo...

Los matices, parece una historia de amor, pero carece de ternura, más bien me parece añorante a lo mejor un poco cruda.